El delegado de Deportes y Juventud, Israel Bascón, y el delegado de Hacienda y Economía, Ignacio Aguilar, han informado en rueda de prensa de la situación actual de la Piscina Cubierta de Vistalegre, que deberá cerrar temporalmente sus puertas el próximo viernes 17 de noviembre, como consecuencia de la denuncia pública presentada por el portavoz socialista, José María Villalobos, en relación con la situación administrativa del servicio.

El Ayuntamiento ha asegurado que el nuevo contrato del servicio se encuentra en su fase final y que su publicación está prevista para esta misma semana en la Plataforma de Contratación del Estado, por lo que el cierre transitorio se mantendrá únicamente el tiempo imprescindible. Los representantes del gobierno local enfatizaron que la situación administrativa es «heredada», ya que el último contrato de la piscina finalizó en septiembre de 2021 durante el anterior mandato socialista, y el pliego lanzado por el PSOE en mayo quedó desierto, obligando en junio de ese año al Ayuntamiento a abonar 373.369 euros en concepto de deudas e indemnizaciones pendientes, cantidad asumida por el actual equipo de gobierno. A su llegada, además, el nuevo gobierno se encontró con una piscina en estado de deterioro, con deficiencias técnicas, agua fría y apenas 300 usuarios.

«Nos vemos obligados por cuestiones administrativas de cerrar temporalmente la piscina. Es lamentable usar este tipo de denuncias políticas porque al final es una situación heredada que venimos trabajando para regularizar desde el primer día«, explicaba Bascón. Desde entonces, se han rehabilitado las calderas, el vaso de la piscina, las instalaciones eléctricas y las zonas comunes, logrando elevar el número de usuarios a más de 2.300 y generando una lista de espera de unas 80 personas. “Esto demuestra el compromiso de este equipo de gobierno con los utreranos y con el deporte como herramienta de salud y bienestar”, ha añadido Bascón.

Por su parte, el delegado de Hacienda, Ignacio Aguilar, ha explicado que la suspensión del servicio es consecuencia de la denuncia del PSOE, “el interés del PSOE en generar este cierre no es nuevo. El último contrato terminó en septiembre de 2021 y, durante más de dos años, mientras gobernaban, no se preocuparon de regularizar el servicio. Nosotros hemos tenido que asumir una deuda de 373.369 euros y resolver una situación que ellos dejaron enquistada”, ha manifestado Aguilar. Los concejales lamentaron que la denuncia esté provocando «cierto recelo o miedo» entre los técnicos municipales a la hora de firmar facturas que antes contaban con informes favorables.

El delegado también ha detallado que la dilación del nuevo contrato se debe a motivos técnicos y administrativos, como la revisión del nuevo convenio de trabajadores de instalaciones deportivas, la actualización de tasas y las modificaciones necesarias, y aclaró que los trabajadores actuales seguirán trabajando cuando esté aprobado el nuevo contrato.

El gobierno ha asegurado que el nuevo contrato de licitación estará en la Plataforma de Contratación del Estado a más tardar el viernes de esta semana, con la esperanza de que el servicio pueda reanudarse a principios de diciembre, si no hay recursos o trabas por parte de la oposición. Finalmente, los portavoces pidieron a los usuarios y a los trabajadores de la piscina que tengan paciencia y confíen en la gestión del equipo de gobierno.

«Estamos comprometidos 100% con el tema deporte, con el tema salud y que esto lo vamos a revertir lo más rápido posible,» concluyó el delegado de Deportes.