Sobre las nueve de la mañana del miércoles 29 de junio, los agentes de Policía Nacional de Dos Hermanas recibieron una llamada que alertaba de un fuerte olor desagradable emanando de una casa en la calle Fornet Domínguez de la localidad donde vivían una pareja de okupas, por lo que policía y bomberos se presenciaron en la casa para encontrar dos cuerpos en un escenario homicida.

Los fallecidos eran pareja. Tenían unos cincuenta años de edad y eran toxicómanos. Cuando los agentes llegaron al lugar pudieron encontrar el lamentable estado de la vivienda, llena de basura, suciedad, ropa y muebles mohosos. En una habitación encontraron a la mujer, de Cádiz, con heridas de arma blanca en pecho y espalda y en la cama encontraron al hombre sin signos de violencia, también sin vida, originario de Utrera.

Desde el 4 de julio de 2011 hasta febrero de 2012 la mujer había entrado en el sistema de protección de víctimas de violencia de género VIOGEN, pero su caso pasó a estar inactivo tras la sentencia absolutoria de su pareja, el supuesto autor ahora de este crimen. Por ello y por otros indicios en la escena homicida, a falta de confirmación oficial y realización completa de las autopsias, este descubrimiento en Dos Hermanas sería el segundo caso de violencia de género en Sevilla en lo que va de año. Esta hipótesis contempla que el hombre se quitó la vida después de acabar con la de su mujer, llevando bastantes días fallecidos.