El portavoz del gobierno municipal, Ignacio Aguilar, ha denunciado que Renfe vaya a ejecutar obras de mejora en 14 estaciones del núcleo de Cercanías de Andalucía “y se deje fuera de esas obras de mejora a la Estación de Utrera, siendo conocedora Renfe de la necesidad de hacer reparaciones en la estación de nuestra ciudad”. Estas obras auxiliares, que se prevén ejecutar entre el segundo semestre de este año y 2026, afectarán a 14 estaciones de las provincias de Cádiz, Málaga y Sevilla y representarán una inversión por parte de Renfe de más de 2,8 millones de euros.
Concretamente, en el Núcleo de Cercanías de Sevilla está previsto intervenir en ocho estaciones: Lora del Río, Dos Hermanas, Bellavista, Jardines de Hércules, Virgen del Rocío, Cazalla/Constantina, El Pedroso y Brenes, con una inversión total de 1.050.000 euros. En este sentido, la Estación de Renfe de Utrera es la que mayor volumen de viajeros soporta del núcleo de Cercanías C-1, después de las tres estaciones situadas en la capital (Virgen del Rocío, San Bernardo y Santa Justa). Entendiendo que las obras que se van a realizar en las estaciones de los municipios mencionados deban ejecutarse, el portavoz del gobierno municipal señala que, “es incomprensible que no se atiendan las deficiencias de la Estación de Utrera, que Renfe conoce muy bien, y que son tan evidentes que hay una valla colocada a lo largo de toda la fachada para prevenir accidentes”.
Precisamente es que uno de los problemas más acuciantes de la estación es el estado en el que se encuentra el tejado, que presenta roturas por varios sitios y desprendimiento de tejas de la cubierta, de ahí que se haya colocado una valla delante de la fachada para establecer un perímetro de seguridad y evitar la aproximación de la gente. Además, este problema genera filtraciones que hacen que en los días de lluvia la estación se moje en su interior.
También faltan azulejos en el interior de la estación y cada día se van desprendiendo más y tomando peor aspecto la sala de espera de los viajeros. Pero una de las cuestiones a las que Renfe lleva años sin atender y que el alcalde, Francisco Jiménez, lleva años demandando, es el estado del muro que delimita la estación y recorre la valle Veracruz. La tapia está por muchas zonas en el ladrillo, ya que toda la cubierta de cemento hace tiempo que desapareció, lo que provoca que el deterioro del muro vaya cada vez a más y de manera más rápida porque la pared ya no tiene ningún aislante que actúe de protección.
Aguilar señala que se han mantenido conversaciones con Renfe sin que hasta el momento haya habido una respuesta favorable por parte de la empresa para resolver estos asuntos, “aunque no dejaremos de insistir y exigir que se resuelvan todos estos problemas, en primer lugar por la propia seguridad de los viajeros y, en segundo, porque Utrera no se merece que la primera imagen que reciben los viajeros sea la de una edificio en esas condiciones y con una vallado que afea, entorpece y no puede ser considerado seguro”.