«¡Ay! Utrera, Enclave Flamenco» es el título que recibe el proyecto artístico presentado esta mañana en la Casa Surga por parte de Carmen Cabra, la delegada de cultura del Ayuntamiento, acompañada de Antonio Moya, Mari Peña o Antonio Malena, entre otros, además del alcalde de Utrera. Un proyecto que abarca los días 20-21 y 22 de abril para homenajear a las niñas de Utrera, a Fernanda y Bernarda en el centenario del nacimiento de la mayor de las hermanas con conferencias, coloquios, conciertos y hasta una película. Todo el proyecto está enfocado al flamenco en su vertiente más femenina, hablando del flamenco en nombre y palabra de mujer. Se dividirán las jornadas en tres hitos; La herencia, flamencas de papel y el legado.
En el flamenco los nombres más modestos ocultan en su sencillez la mayor dignidad. Eran las Niñas de Utrera, y ese nombre ya indicaba su prevalencia dinástica en el arte jondo: herederas de la casa de los Pinini, de Rosario la del Colorao, últimas depositarías de los cantes de La Serneta… Eran Fernanda y Bernarda de Utrera. Los hilos de sus vidas se entretejieron en un destino común, y sus nombres quedaron amarrados a la ciudad que las alumbró.
Utrera está en el centro del aquel triángulo fundacional del flamenco de la Baja Andalucía, que siempre fue más un poliedro que una figura plana, porque en sus vértices confluyen las aristas de las casas cantaoras de Jerez, de Triana, de Alcalá, de Lebrija… que han cruzado sus caminos y su sonidos desde los orígenes de este arte. Como el signo de un nuevo tiempo, el público supo de ellas por primera vez a través de la gran pantalla, con su participación en la cinta de Edgar Neville, Duende y misterio del flamenco, de 1952. Fueron ellas las que abrieron un camino poco transitado para su linaje y el cante utrerano, que pasó de la celebración familiar a las tablas. En muy pocos años -llevando también su luto al escenario- son proclamadas ganadoras del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba. Son, precisamente ellas, las que ocupan el centro de lo que se ha venido a llamar en nuestra ciudad como «edad dorada», esa singularidad espacio-temporal en la que la jondura de sus cantes tendían al infinito.
Menudas, humildes y a pesar de todo inmensas. Cuentan que estando en Nueva York en 1964, en ese techo del mundo levantado por la ambición humana, desde uno de sus rascacielos y ante la inmensidad del horizonte, una hermana inquirió a la otra: «¿por dónde quedará Utrera?». Ellas eran enormes, pero quisieron que sus pasos las llevaran siempre a Utrera, siempre juntas. Porque la raíces en el aire mueren y ellas eran la raíz misma del cante. Así las retrató la fotógrafa Isabel Steva, Colita, cuando peregrinó desde Barcelona a la campiña andaluza para captar la esencia de este arte vernáculo; entre las tapias blancas de las casas, en la alegría íntima de la familia, desposeídas del artificio de espectáculo, pero con toda la solemnidad de quien trasciende solo con su presencia.
La ciudad que las vio nacer hace cien años (1923-1927), tiene el propósito de estar a la altura de su legado, y recordar sus vidas, su arte, su valentía. Recordaremos a las mujeres que subieron a las tablas en las décadas más grises de este país, entreverando hilos de oro en la negrura del cante; y no solo a Fernanda y Bernarda, sino a toda una saga de artistas cuya memoria guardan las familias de Utrera entre fotos, cartas y grabaciones: la Feonga, la Pepa, Inés de Utrera y tantas otras. Y tendiendo puentes, queremos reconocer hoy a nuestras flamencas, creadoras en las más diversas facetas, dentro y fuera de los escenarios, mujeres conscientes del ser flamenco como parte de la propia esencia de la vida. Nuestras artistas, figuradoras de dibujos en el aire, peinadoras de sonidos de cuerdas y viento. Nuestras flamencas de papel; escritoras, divulgadoras, investigadoras. Nuestras artífices de sueños, fotógrafas, cineastas y pintoras. Solo pronunciando sus nombres haremos presente su memoria; y solo andando nuestro tiempo abriremos la vereda.
Programación Flamenco en F
Jueves 20 de abril
17h – Bienvenida
17.30h – 19h : Conferencia «Ecos de una cantaora, una mesa, un tablao , un mito» por parte de Cristina Cruces Roldán
19-19.30h : pausa para el café
19.30h – 20.30h : Coloquio «La mujer creadora», con la intervención de Maui, María Marín, Leonor Leal, Mari Peña, Manuela del Moya y Ana Morales (junta directiva de Unión flamenca), moderado por Sara Arguijo
21h – Trasnoche taberna El Currito «Sopa de Tomate», con la actuación de Mari Peña, Manuela del Moya, Rocío la Turronera y Antonio Moya a la guitarra
Viernes 21 de abril
17-18h : Conferencia de Ángeles Cruzado, «Flamencas por derecho»
18-18.30h : pausa para el café
18.30-19.30h : Conferencia de Remedios Málvarez «Flamencas de cine»
19.30h-20.30h: Coloquio «Flamencas de papel», intervienen Eusebia López, Alicia González y Lola Pantoja, moderando Sara Arguijo
21h: La Macanita acompañada por Saira Malena dará el primer concierto del ciclo «El legado 100 años» dedicado a Fernanda y Bernarda con el espectáculo dirigido por Antonio Malena «Que te quiero sin interés de ningún dinero», en el Teatro Enrique de la Cuadra
Sábado 22 de abril
12-12.30h: Presentación del programa «Uno a uno» desarrollado desde el área de cultura con el fin de impulsar la distribución de los artistas locales. Encuentros virtuales de nuestros artistas con programadores nacionales e internacionales.
12.30h-14h: Proyección de la película «Fernanda y Bernarda», una película de Rocío Martín, la presentación del teaser (un adelanto) y el proceso creativo.
14.30h: en «Fetén, la Casa del Arte» se realizará la última actuación «Papas con costillas» por parte de Dani de Utrera, Encarni Jiménez, Adrián Casero y Pitín hijo a la guitarra.
Todos los eventos, excepto los que contienen una ubicación exacta en la programación, se llevarán a cabo en el centro cultural Casa Surga.