Salir por la tarde y ver el Cristo de los Afligidos y la Virgen de los Desamparados discurrir por el Arco de la Villa, cenar e ir hasta la parroquia de Santiago para contemplar el Cautivo y la Señora de las Lágrimas en respetuoso silencio, trasnochar para seguir el ritmo festivo del Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Esperanza con la Hermandad de los Gitanos y finalmente apurar unos churros con chocolate para dirigirnos hasta la capilla de San Bartolomé y ver al Jesús Nazareno y la Señora de las Angustias salir de su casa al alba para acabar la jornada nocturna de la «madrugá utrerana» ya en el Viernes Santo.

Desde las siete de la tarde de este Jueves Santo en Utrera en la capilla de la Trinidad con la salida del Cristo de Los Afligidos y la Virgen de los Desamparados comenzaba la tarde-noche más relevante de la semana grande de nuestra localidad. Con ese discurrir por el Arco de la Villa que deja a todos con el aliento contenido, la tarde comenzaba radiante con un sol que agradaba el contacto y un cielo despejado.

Desde Utrera al día lo grabamos en directo a su paso por la calle La Plaza rumbo a la calle San Fernando, próximo a su recogida.

Ya por la noche, a las diez de la noche en la parroquia de Santiago con todo apagado y listo para la ocasión, se abrían las puertas para dar paso a la cofradía más «solemne» de la Semana Santa utrerana, la Hermandad del Redentor Cautivo y su Virgen de Las Lágrimas, en completo silencio y únicamente alumbrados por los cirios de los nazarenos vestidos de negro, las imágenes con paso firme, a grandes zancadas y con paradas cortas, discurrió por las calles de Utrera, con un respeto unísono con la Trinidad y Los Gitanos con las que casi se cruzaba en algún momento.

Utrera al día lo grabó subiendo por Catalina de Perea rumbo a su visita obligada por las puertas de Santa María de la Mesa.

Pasada la medianoche, con la fiesta y la gente en auge por las calles de Utrera, viviendo su «madrugá» con total apogeo, salía desde la parroquia de Santiago la Hermandad con más ritmo, alegría y festividad de nuestra ciudad, la Hermandad de los Gitanos se disponía a las 00.30h ya del Viernes Santo a realizar su estación de penitencia con el Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Esperanza, con su característico manto verde, símbolo del pueblo gitano que los acompañó de principio a fin.

Utrera al día los grabó a su paso por el Ayuntamiento

Nos pasamos al fin de la madrugada propiamente dicha y tenemos que desplazarnos hasta la Capilla de San Bartolomé a las 6.30h de la mañana, cuando la cruz de guía de El Señor de Utrera salía de su casa para abrir las calles de la ciudad ya en la mañana del Viernes Santo, poniendo fin a «la madrugá» y continuando con el segundo día grande del auge de la Semana Santa de Utrera, al que aún le quedan dos hermandades más por procesionar.

Utrera al día ha captado las imágenes del Jesús Nazareno y Nuestra Señora de las Angustias rumbo a su recogida a su paso por la calle ancha.