La lluvia y las previsiones, nada halagüeñas,  hicieron que el comienzo de la Semana Mayor 2018 no tuviera el resplandor a que nos tiene acostumbrados en la mañana del Domingo de Ramos con la salida del misterio de La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, más conocida como la Borriquita, de la Hermandad de la Trinidad, acompañada por multitud de niños y niñas con sus palmas.

En torno a las 11 de la mañana la Junta de Gobierno comunicaba que se retrasaba la salida una hora por la lluvia que en esos momentos caía en la Calle Cristo de los Afligidos, para comunicar antes de que la hora se cumpliera que se suspendía, totalmente la salida, debido a las previsiones de lluvia que si no eran fuertes, no aseguraban que se pudieran evitar por lo que, acertadamente, la Junta de gobierno dirigida por Luis Pérez Estévez decidía, «por que tenemos que defender los enseres de nuestra Hermandad, y sobre todo el nuevo paso, que nos han dicho que este año no podía caerle ni una gota de agua», nos comentaba al respecto.

Tras la suspensión, la Capilla trinitaria permaneció abierta hasta las 14:00 horas para que todo aquel que así lo deseara pudiera ira ver ese imponente misterio que tendrá que esperar al próximo año para estrenarse por las calles de Utrera.