“Ya son 440 las solicitudes de la Renta Mínima de Inserción,  comúnmente denominada Salario Social, presentadas en los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Utrera, y todavía no ha concluido el año, con lo que se prevé que esta cifra lamentablemente aumente”, ha señalado la delegada de Servicios Sociales del consistorio utrerano, Eva Carrascón .

440 personas que desde el 1 de enero de este año están esperando una respuesta de la Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía,  sin que hasta la fecha hayan obtenido respuesta alguna. El salario social constituye hoy en día la única fuente de ingresos para muchas familias, que sin estos se ven abocadas a la indigencia o a acudir a los Servicios Sociales y entidades del Tercer Sector.

En Andalucía contamos con el denominado Programa de Solidaridad de los Andaluces para la erradicación de la Marginación y la Desigualdad,  regulado por el Decreto 2/1999, de 12 de enero, que incluye la denominada Renta Mínima de Inserción de Solidaridad,  popularmente conocida como  salario social,  “y que la Junta de Andalucía y el PSOE incumplen sistemáticamente sin ningún pudor”. La Eva Carrascón (PP), afirma que “no se puede seguir asistiendo impasibles a la realidad de muchas personas que no cuentan con los medios indispensables para garantizar su sustento diario, un techo, o el pago de servicios esenciales como la luz o el agua”.

Detrás de estas 440 solicitudes hay unos 2.000 utreranos con nombres y apellidos y unas trágicas circunstancias familiares y económicas, muchos de los cuales acuden a diario a los Servicios Sociales a mostrar su enfado y desesperación,  preguntando cuándo la Junta de Andalucía va a pagarles lo que les debe desde hace un año. “El retraso en el pago del salario social es la máxima expresión de la insensibilidad social del PSOE, cuya postura en este asunto es indefendible. En estos momentos el PSOE les está negando a estas familias el único ingreso que pueden percibir, que necesitan para comer y que les corresponde por ley”. Pero, a juicio de la delegada, “lo más grave es que están mintiendo a todas estas personas que se encuentran en una lamentable situación económica,  porque la Junta se comprometió a tramitar el salario social en dos meses y llevan un año de retraso. Ahora, más que nunca, el salario social debería funcionar a la perfección. Es miserable no pagar y, desde luego, es más miserable todavía deber a los más necesitados”.

Carrascón,  exige a la Consejera de Bienestar Social de la Junta que muestre la sensibilidad social, que hasta la fecha no ha tenido, para con las familias perceptoras del salario social, y que adopte inmediatamente medidas que otorguen al cobro mensual de estas prestaciones las mismas garantías de abono en plazo que actualmente tienen el cobro de las pensiones o los salarios públicos. “Mientras el PSOE en Utrera y Andalucía siga mirando para otro lado, ésta delegada y el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Utrera continuaremos actuando, como siempre lo hemos hecho, dando apoyo social y económico a estas familias”.

Considera que la Consejera y el PSOE tienen que explicar a los utreranos “en qué se han gastado el dinero consignado en el Presupuesto de la Junta de Andalucía del 2014 destinado al salario social, porque todas estas familias no se merecen una Presidenta de la Junta que se limita a lamentar que los andaluces lo estén pasando mal, necesitan respuestas y las necesitan ya”.

También solicita del portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Utrera, José Mª  Villalobos, quien hace tres meses afirmaba en nota de prensa que  la atención a los más necesitados es una prioridad y que no tardaría ni un minuto en poner en marcha cualquier medida por el bien de sus vecinos, porque las familias no pueden esperar, a que por el bien de estas 440 familias, pase de las palabras a los hechos y no tarde ni un minuto en pedirle a su compañera de partido, la Sra. Consejera de Bienestar Social, que ordene el pago inmediato del salario social a los beneficiarios utreranos. En caso contrario, ambos deberán explicar públicamente cuáles son en realidad sus prioridades políticas”.