El transporte gratuito en Utrera quería ser una realidad desde que el gobierno anterior del Partido Socialista lo anunciase a finales del 2022 de cara a implementarlo en el presupuesto municipal del 2023. Los meses pasaron y el autobús urbano que sería gratis para los ciudadanos desde la entrada del nuevo año se retrasó. El motivo era el ajuste de presupuesto para cubrir gastos, acordar términos con la empresa concesionaria y preparar todo «el papeleo» para su puesta marcha, que desde el PSOE, aseguran que estaba todo listo para el mes de mayo. Tras el resultado de las elecciones que cambió la organización del consistorio, el autobús gratis no era una prioridad sobre la mesa, por lo que en el pleno ordinario de pasado 14 de septiembre, Antonio Villalba (PSOE) llevó esta cuestión a debate, con la respuesta tajante del concejal «no vamos a dejar gratis el autobús es una medida que no contemplamos, la consideramos innecesaria”. Sin más explicaciones, ni por el alcalde ni por el concejal.

«Está demostrado que el uso del transporte público aumenta exponencialmente con la gratuidad del mismo, solo hay que echar un vistazo a los números de los primeros meses del nuevo sistema de bus en Utrera o ahora en los cercanías de Renfe. También tenemos el caso de los abonos de estudiantes, que en 2019 redujimos de 96 a 36 euros al año (más de un 60%) y los usuarios se multiplicaron por tres, teniendo este año incluso que aumentar el número de autobuses«, explican desde el Partido Socialista.
La gratuidad es una medida que, además de universalizar el acceso al transporte, disminuye el tráfico y la contaminación. «Son todo ventajas para Utrera y los utreranos que ni Jiménez ni su gobierno quieren ver». El fomento del transporte público es una medida esencial para que disminuya el tráfico y con ello la contaminación, en definitiva, imprescindible para la lucha contra el cambio climático, «aunque lamentablemente todas las medidas en materia de movilidad que ha tomado Jiménez hasta ahora van en la dirección contraria, en una resistencia irresponsable a la agenda verde. Jiménez se está convirtiendo en un negacionista climático«, explican desde el partido de la oposición.
El actual transporte público de Utrera se puso en marcha en 2019 con un contrato de 10 años en principio para ver cómo evolucionaba este servicio en el municipio.
«Es triste que las medidas estrella hasta ahora del “nuevo-viejo” alcalde y su “nuevo- viejo” partido estén pasando por destruir: no al transporte público gratuito, despeatonalización del Paseo de Consolación, desmantelamiento de la actividad cultural y cierre del albergue para personas sin hogar», concluyen los socialistas, lamentando estas decisiones.