En el transcurso del Pleno Ordinario de este mes de marzo, a través del Escaño Ciudadano, el alcalde ha respondido a una serie de preguntas formuladas por la Asociación de Vecinos de La Fontanilla, relativas a las obras de saneamiento y nuevo colector de la barriada. El proyecto de Renovación de la Red de Saneamiento en la barriada de La Fontanilla, se acometió por el anterior gobierno municipal y fue redactado por Aguas del Huesna. Contaba con un presupuesto inicial de 655.000 euros que, durante las obras de cajeado de la zanja para la introducción de tuberías y saneamientos y abastecimiento se consideró insuficiente y se destino para este fin una partida adicional de 116.000 euros.

Las nueva red y sus arquetas de arranque se han ejecutado lo más cerca posible a las viviendas, hasta donde lo ha permitido la ingeniería y los límites de la propiedad privada. En la mayoría de los casos, la distancia media es de un metro desde la puerta de los bloques hasta la conexión a la general.
Estas obras se han desarrollado en terreno público, pero falta la siguiente fase que es la que realmente resuelve el problema, pero que no es competencia exclusiva del Ayuntamiento, puesto que hay que actuar en una zona que ya es propiedad privada, según explican desde el consistorio en un comunicado. Los vecinos argumentan que el gobierno anterior nunca les dejó claro que las obras no llegarían hasta sus casas, por lo que el problema actual es muy grave, ya que sin apoyo municipal no es posible que se realicen las conexiones debido al alto coste de las obras, imposible de asumir íntegramente por los propietarios de las viviendas.

Lo cierto es que este es un problemas que hay que resolver, por lo que el alcalde, Francisco Jiménez, ha anunciado que en el Presupuesto Municipal, que se espera someter a aprobación el próximo mes, su intención es incluir una partida económica destinada a dar una alternativa a los vecinos “pero ellos tienen que ser conscientes de que, al igual que en otras barriadas, esta parte de la ejecución no va a corresponder cien por cien al ayuntamiento, sino que los vecinos tendrán que colaborar. No hay otra fórmula y no se podrían resolver los problemas de no ser así. Para ello, vamos a disponer de recursos municipales que tendrán que venir acompañados del compromiso de los vecinos».
Ya se están haciendo algunas valoraciones sobre los costes que pueda suponer la conexión a la red general de cada bloque, “a mí me encantaría decir que se va a hacer todo de una vez, pero eso no es posible porque estará en función de lo que se ponga desde el ayuntamiento y de los vecinos de los bloques que estén dispuestos a ello”.
Jiménez también respondió a la presidenta de La Fontanilla sobre el uso del término “barriada marginal”, señalando que “el uso de estas palabras no resulta beneficioso, especialmente para la propia barriada, no creo que haya motivos para considerar a La Fontanilla un barrio marginal, desde luego yo lo conozco muy bien y lo he vivido y nunca lo he considerado así”, argumenta el alcalde, que añade que La Fontanilla tiene problemas, como muchos otros barrios, “pero gracias a las actuaciones municipales y a la implicación de los vecinos podemos decir que está teniendo un cambio radical y es en esa dirección en la que estamos trabajando”.