La directora de la Asociación Mujeres de Santiago, que cumple 24 años en activo, Inma Aguilar nos relata en una entrevista todos los entresijos de la labor social de la Asociación y nos explica en concreto el proyecto «T-Acompañamos Jóvenes», promocionado por el SAE, para promocionar la inserción laboral de los jóvenes desempleados entre 18 y 29 años. Tal como aclaraba Aguilar «es importante que quieran y se impliquen en insertarse en el mundo laboral».

Se trata de un proyecto de formación e información, aunque tienen unos indicadores para la inserción, de las 60 personas que van a atender «10 de ellas tienen que encontrar empleo, por lo que tenemos que elegir los mejores perfiles para la inserción«, con un incentivo de 528 euros brutos, «eso podría ser llamativo para que cualquiera se apunte, pero ese incentivo solo está para la gente que realmente quiere trabajar, nuestra labor es acompañar en el proceso e insertarla durante cuatro meses en un empleo», un proyecto que no es nada fácil. Este programa está diseñado para facilitar la inserción laboral de jóvenes de entre 18 y 29 años, desempleados e inscritos en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil. Los jóvenes interesados pueden solicitar su participación a través del siguiente formulario.

El programa ‘T-Acompañamos’ ofrece un enfoque integral que combina acciones de orientación laboral y formación, adaptadas a las necesidades individuales de cada participante. Las actividades se desarrollarán en dos fases:

• Fase de Atención: Los participantes recibirán un mínimo de 10 horas de orientación laboral personalizada, donde se evaluarán sus habilidades, intereses y experiencias para diseñar un itinerario de inserción
  adecuado. Además, se impartirán un mínimo de 50 horas de formación específica para mejorar sus competencias y empleabilidad.
• Fase de Inserción: Se llevarán a cabo acciones de acompañamiento y asesoramiento para facilitar la incorporación al mercado laboral, incluyendo prospección de oportunidades de empleo y preparación para procesos de selección.

Inma Aguilar nos detalla que también tienen el proyecto «T-Acompañamos» para los colectivos vulnerables, personas mayores de 45 años, con algún tipo de discapacidad, desempleados de larga duración o con ingresos mínimos, un proyecto que ya está cerrado pero aún quedan algunas plazas. También trabajan con menores 6 años, «comenzamos en 2001 buscando insertar a las mujeres en el mundo laboral y con los años hemos ampliado la edad de los participantes«, por lo que algo que comenzó con las mujeres -de ahí el nombre de la Asociación- ahora trabajan con infantes, niños, adolescentes y adultos.

Actualmente, cuentan con 8 trabajadores de forma permanente, 14 voluntarios y una red amplia de colaboradores, «creemos en el apoyo y acompañamiento, no en el asistencialismo» con la premisa de que la educación es la clave. En sus inicios ayudaban a mujeres a trabajar con lo que les gustase, pues muchas de ellas no tenían estudios «hacían talleres de costura o detalles para bodas para que ellas montasen sus propios negocios».

En cuanto a la situación social de Utrera, ha mejorado con respecto a 24 años atrás, pero seguimos teniendo que trabajar mucho, «hay que decir que Utrera vive mucho de la economía sumergida, habría que trabajar en eso porque es una parte muy negativa». Respecto a la educación ha mejorado bastante y se ha visto reducido el fracaso escolar. A nivel demográfico han llegado muchas familias inmigrantes a la localidad, muchos sin papeles, por lo que se incrementan los trabajos precarios. También el problema de la vivienda está mermando la calidad de vida en la localidad con varias familias viviendo bajo el mismo techo en una habitación.

«Ojalá pudiéramos dejar de existir porque ya no seríamos necesarios», declaraba la directora.