«Promesas incumplidas, proyectos heredados paralizados y una ciudad en declive», así resume el PSOE de Utrera la gestión de Francisco Jiménez, asegurando que el 2025 ha comenzado en nuestra ciudad con parálisis política, haciendo referencia en primer lugar a la limpieza de la ciudad, «a pesar de haber subido los impuestos un 30%, la ciudad está más sucia que nunca», con la municipalización del servicio descartada por completo.

Sobre la Zona Azul de Utrera, «prometió eliminarla, pero sigue en funcionamiento, generando 3,5 millones de euros en plusvalías sin un destino claro«, denuncian desde el PSOE. También critican que el PP se «adueña» de proyectos heredados, retrasados «a propósito para hacerlos propios». Es el caso de los parques de la Vereda y Cristo de los Afligidos, el campo de césped de Campoverde o la restauración de la muralla del castillo.

Sobre el Museo de la Ciudad, destacan los socialistas que Jiménez lo prometió en 2003 y, más de dos décadas después, sigue sin materializarse. Lo mismo ocurre con la sinagoga, que ha sido “inaugurada” hasta tres veces sin que su apertura sea una realidad. «Mientras tanto, la oficina del DNI, una demanda histórica de 30 años, sigue sin ejecutarse pese a que tenía financiación en 2023. Una irresponsabilidad que afecta directamente a los ciudadanos», declaran.

Respecto a los económico, el PSOE anuncia que el cierre del presupuesto de 2023 ha dejado un agujero de 1,5 millones de euros, una situación que el PSOE ha calificado de “caótica y peligrosa para el futuro de la ciudad”. Utrera no solo pierde recursos, «sino que queda en una situación de vulnerabilidad económica y social sin precedentes«. Además, «Jiménez ha renunciado a proyectos clave para el desarrollo de la ciudad, como el nuevo polígono industrial o el parque de Vistalegre, financiado con fondos europeos que ahora están en riesgo. Mientras tanto, los colegios siguen en mal estado y los servicios públicos se deterioran«, finalizaban.