«Casi un huracán«, así ha definido el alcalde de Utrera, Francisco Jiménez, en rueda de prensa este lunes, la magnitud del temporal de viento de hasta más de 80km/h que azotó Utrera ayer desde las 18.30h de la tarde hasta que comenzó a reducirse sobre las 00h. Han sido en torno a 90 incidencias las que se han producido en la tarde-noche del domingo por las casi 2 horas de viento sin tregua y con mucha fuerza que ha destrozado árboles, tejados, parques y líneas eléctricas de alta tensión.
Sobre las 19.30h de ayer domingo 22 de octubre, el alcalde lanzó una aviso de activación de la fase 1 del Plan de Emergencias en Utrera con Policía Local, Guardia Civil, Bomberos, Protección Civil y trabajadores de diferentes delegaciones del ayuntamiento volcados en solventar los problemas que las caídas de árboles estaban provocando en toda la localidad hasta altas horas de la madrugada. En este momento la máxima prioridad es atender las líneas eléctricas que se han caído y todo el personal del Servicio Eléctrico está trabajando en ello, según ha recalcado el alcalde. Poco a poco se está restableciendo el servicio eléctrico en domicilios y calles, pero depende de las líneas de alta tensión que han caído y en ellas está trabajando Endesa.
Tras una reunión con los directores de los colegios e institutos de Utrera, se estipuló que sí habría clases porque afortunadamente no hubo problemas en sus instalaciones más allá de retirar restos de árboles caídos o acotar zonas para que no hubiese riesgo para los alumnos. Se han habilitado tres teléfonos de atención al ciudadano para comunicar las incidencias que son: 636 022 300 , 699 081 084 y 682 191 378.
El Ayuntamiento ha puesto todos los recursos, al igual que las empresas que trabajan para el consistorio, volcando en las calles hasta 200 personas trabajando la limpieza y retirada de árboles para permitir la seguridad de los viandantes. Una incidencia destacable fue un pequeño incendio en el que las personas afectadas fueron atendidas en el chare por inhalación de humo. Otra de ellas ha sido el corte de vía férrea a la altura de Cantaelgallo por lo que trenes de Cádiz y Málaga no pudieron continuar y sus pasajeros tuvieron que ser desalojados en la estación de Utrera en la madrugada. Renfe no facilitó alternativas, pero el Ayuntamiento envió a efectivos de Protección Civil para ofrecer bocadillos y agua.
«Se han perdido centenares de árboles, por lo que tendremos que hacer un gran esfuerzo y considerable inversión para rescatar las maravillas y parques que teníamos en Utrera y que este temporal ha dañado», aclaraba Jiménez. «Hay 4 retroexcavadoras y 30 vehículos que trabajan de forma simultánea en muchos puntos de la ciudad para despejar los accesos a urbanizaciones», continuaba el edil. «Doy las gracias a todos los servicios de seguridad y a la ciudadanía por su colaboración», evitando así daños personales.
El Paseo de Consolación, la Av. Portugal y la Av. Los Palacios permanecen cerrados al tráfico para la reparación del tendido eléctrico por parte de Endesa. Además, el alcalde de Utrera y otras localidades afectadas barajan la posibilidad de solicitar que se decrete zona catastrófica, pero aún no es algo contemplado como seguro. En los próximos días saldrán más incidencias a nivel particular que los ciudadanos deberán pedir información a su compañía de seguros para suplir esos daños. Sin embargo, los daños que sí cubre el consistorio serán la caída de árboles sobre coches estacionados.
Se han perdido centenares de árboles, algunos nuevos y otros con 100 años de historia en la localidad, «hay que asumir que se han perdido«, explicaba Jiménez pues hay árboles que el viento ha arrancado de raíz llevándose incluso la solería a su paso, pero desde el Ayuntamiento se pondrán todos los recursos disponibles para solventar todos los destrozos, «la idea es que si se pierden 100 árboles, plantar 200″, recalcaba el alcalde.
Finalmente, el edil utrerano ha recalcado que este aviso naranja de rachas de viento de casi 90 kilómetros por hora no fue previsto, AEMET cambió dos horas antes su previsión respecto al viento de la borrasca Bernard que entraba la tarde del domingo 22 de octubre por el Golfo de Cádiz, penetrando con viento y lluvia en las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, por lo que lo ocurrido en Utrera no estaba previsto.
